Mañana empieza el curso escolar para los niños y niñas andaluces.
El día 1 de septiembre comenzó para el profesorado. Ese primer día, la jefa de estudios de mi colegio nos entregó el calendario escolar y la programación de las actividades a realizar para preparar el comienzo del nuevo curso.
Entre papel y papel había uno que llamó mi atención por su encabezamiento: “Por si tenéis un ratillo” y me dispuse a leerlo en primer lugar:
«Llega otro curso. A veces, olvidamos los quebraderos de cabeza y los malos momentos del anterior. Otras, nos esforzamos por no olvidarlos y comenzamos cargados con prejuicios negativos. Si tenéis un ratillo, me gustaría que reflexionáramos sobre los siguientes puntos:
- Formamos parte de este colegio. No hablemos mal de él y esforcémonos por mejorarlo.
- No malgastemos nuestra energía y seleccionemos cómo utilizar nuestros esfuerzos.
- No encasillemos a los compañeros/as por su edad, apariencia o ideas. Hay buenos profesionales con muchos disfraces.
- Dejemos que los demás tengan su protagonismo.
- No consideremos las opiniones de los compañeros como ataques personales.
- Todas las cosas pueden enfocarse desde muchos puntos de vista. Cuando expongamos el nuestro, intentemos que nadie se sienta ofendido.
- La palabra “ayúdame” es mágica y una forma de reconocer y validar al otro.
- No somos perfectos: perdona y perdónate los errores.
- No esperemos ninguna recompensa o halago por la labor bien realizada.
- Hagamos lo que debamos hacer sin crear obligaciones en los otros.
- Comparte todo lo bueno que sepas.
- Seamos siempre respetuosos, incluso cuando no lo sean con nosotros.
- Estemos siempre dispuestos para ser útiles.
- Utilicemos una buena dosis de humor, paciencia y humildad.
Y, sobre todo, no os olvidéis de ser felices».
Ahí queda eso.
“Pa” qué vamos a decir “na” si ya está “to” dicho.
Ea, pues con estas buenas vibraciones empezamos mañana.
Mis mejores deseos para el nuevo curso a todos los profesionales de la enseñanza. ¡Que la suerte nos acompañe!
- Los expertos (III)
- Los maestros también lloramos
- Que Dios nos ayude a los docentes
- Un corto recortado
- Una siesta de doce años
No hay comentarios
Publicar un comentario en la entrada