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jueves, 30 de julio de 2015

La fuerza de una sonrisa

Fuente: “Pensamientos cotidianos” de Omraam Mikhaël Aïvanhov.


  “La forza del sorriso” (“El poder de la sonrisa”). Andrea Bocelli.

«Es extraordinario ver cómo una sonrisa puede transformar las caras inexpresivas, o incluso ingratas. Porque una buena sonrisa va acompañada de una buena mirada, y esta mirada llena de amor, de bondad, proyecta una luz tal que los rasgos de la cara parecen fundirse con ella: solo se ve esta luz. ¡Y qué gozo, qué consuelo puede aportarnos también esta sonrisa! Es como un regalo que no nos esperábamos. ¡Y la sonrisa del sol cuando emerge de las nubes para envolvernos con su luz!

Pero la más bella, la más deseada, la sonrisa a la que aspira toda nuestra alma, es la que Dios nos da tras los sufrimientos a los que creímos no poder sobrevivir. En cuanto esta sonrisa aparece, la oscuridad, la angustia, el miedo, las imágenes amenazadoras se esfuman, todo se ilumina y se armoniza. Esta sonrisa vale más que todas las riquezas y todos los demás gozos de la tierra. Ninguna violencia puede conquistarla, sino solamente el amor, la esperanza y la fe. A menudo hay que esperar mucho tiempo para merecer una sonrisa así. Es la mayor de las recompensas».

Doy gracias a Dios por la sonrisa que ha querido regalarme tras la marcha, pronto hará dos años, de mi hermano. Una sonrisa que nace en lo más profundo de mi alma porque sé, ahora lo sé, está vivo…


lunes, 27 de julio de 2015

Por sus frutos los conoceréis

Fuente: “Pensamientos cotidianos” de Omraam Mikhaël Aïvanhov.

«¡Cuántos dicen poseer la verdad! Ignoran que hay criterios objetivos para juzgar si ello es cierto. El que está en la verdad se distingue por diferentes cualidades, y particularmente por su bondad, su nobleza, su desinterés. Por eso, cuando veo a alguien que dice poseer la verdad, cuando en realidad es odioso, huraño, vengativo, tengo ganas de decirle: “Pues bien, si eso es la verdad, no vale la pena hacer el menor esfuerzo para acercarse a ella”. Pero los humanos raramente tienen criterios. Ven a algunos energúmenos predicar el odio y la violencia en nombre de la verdad, y están dispuestos, no solo a seguirles, sino a imitarles hasta llegar al crimen.

Nunca creáis al que dice poseer la verdad si no os muestra su diploma. Y este diploma no es un trozo de papel, es un diploma vivo que los sabios y los espíritus de la naturaleza pueden leer desde lejos, porque brilla, proyecta rayos. Cuando encontramos a un ser así, tenemos la sensación de que nos ilumina, nos calienta, nos fortifica. Es como si asistiésemos a una salida de sol».


miércoles, 22 de julio de 2015

La actitud ante la verdad

Este cuento está incluido en el libro “101 cuentos clásicos de la India”, recopilación de Ramiro Calle, con el título “Doce años después”.

«Era un joven que había decidido seguir la vía de la evolución interior. Acudió a un maestro y le preguntó:

—Guruji, ¿qué instrucción debo seguir para hallar la verdad, para alcanzar la más alta sabiduría?

El maestro le dijo:

—He aquí, jovencito, todo lo que yo puedo decirte: todo es el Ser, la Conciencia Pura. De la misma manera que el agua se convierte en hielo, el Ser adopta todas las formas del universo. No hay nada excepto el Ser. Tú eres el Ser. Reconoce que eres el Ser y habrás alcanzado la verdad, la más alta sabiduría.

El aspirante no se sintió satisfecho. Dijo:

—¿Eso es todo? ¿No puedes decirme algo más?

—Tal es toda mi enseñanza —aseveró el maestro—. No puedo brindarte otra instrucción.

El joven se sentía muy decepcionado, pues esperaba que el maestro le hubiese facilitado una instrucción secreta y algunas técnicas muy especiales, incluso un misterioso mantra. Pero como realmente era un buscador genuino, aunque todavía muy ignorante, se dirigió a otro maestro y le pidió instrucción mística. Este segundo maestro dijo:

—No dudaré en proporcionártela, pero antes debes servirme durante doce años. Tendrás que trabajar muy duramente en mi ashram (comunidad espiritual). Por cierto, hay un trabajo ahora disponible. Se trata de recoger estiércol de búfalo.

Durante doce años, el joven trabajó en tan ingrata tarea. Por fin llegó el día en que se había cumplido el tiempo establecido por el maestro. Habían pasado doce años; doce años recogiendo estiércol de búfalo. Se dirigió al maestro y le dijo:

—Maestro, ya no soy tan joven como era. El tiempo ha transcurrido. Han pasado una docena de años. Por favor, entrégame ahora la instrucción.

El maestro sonrió. Parsimoniosa y amorosamente, colocó una de sus manos sobre el hombro del paciente discípulo, que despedía un rancio olor a estiércol. Declaró:

—Toma buena nota. Mi enseñanza es que todo es el Ser. Es el Ser el que se manifiesta en todas las formas del universo. Tú eres el Ser.

Espiritualmente maduro, al punto el discípulo comprendió la enseñanza y obtuvo iluminación. Pero cuando pasaron unos momentos y reaccionó, dijo:

—Me desconcierta, maestro, que tú me hayas dado la misma enseñanza que otro maestro que conocí hace doce años. ¿Por qué habrá sido?

—Simplemente, porque la verdad no cambia en doce años, tu actitud ante ella, sí.

Cuando estás espiritualmente preparado, hasta contemplar una hoja que se desprende del árbol puede abrirte a la verdad».


viernes, 17 de julio de 2015

El camino de la realización personal

Fuentes: Wikipedia y “99% feliz” de Dorian Lucas.

“La pirámide de Maslow”, o jerarquía de las necesidades humanas, es una teoría psicológica propuesta por Abraham Maslow en su obra “Una teoría sobre la motivación humana” de 1943.

Maslow coloca las necesidades más básicas o simples en la base de la pirámide y las más relevantes o fundamentales en la cima de la misma. A medida que las necesidades van siendo satisfechas o logradas, surgen otras de un nivel superior.

Las necesidades fisiológicas nacen con la persona, el resto de las necesidades surgen con el transcurso del tiempo. En la última fase se encuentra la “autorrealización”.

Por orden creciente, desde la base de la pirámide hasta la cúspide, las necesidades humanas hasta alcanzar la autorrealización personal serían estas:

1) Necesidades fisiológicas como respirar, comer, beber, dormir o mantener relaciones sexuales, bien resueltas para muchas personas residentes en el mundo desarrollado.

2) Necesidades de seguridad en diferentes ámbitos, como la seguridad y estabilidad que proporcionan en tener una familia, un trabajo y unos ingresos, una buena salud, recursos económicos y propiedades.

3) Necesidades sociales o de afiliación, es decir, el deseo de estar en contacto con otras personas, entre las cuales figuran los amigos, la familia y la pareja (el amor), los compañeros de trabajo u otros grupos. El ser humano es un “animal” social y necesita sentirse arropado y parte de un grupo.

4) Necesidades de reconocimiento, ya que el ser humano tiene la necesidad de sentirse querido y reconocido socialmente; desea tener cubiertas sus necesidades de respeto, éxito, confianza y autorreconocimiento.

5) Necesidades internas o de autorrealización, pues una vez que se tienen cubiertas las necesidades de los niveles anteriores, el ser humano aspira a concentrarse en su crecimiento interior, espiritual y moral, a través de su dedicación a los demás o de comprender cuál es su misión en la vida.

Aunque las necesidades más básicas predominarán sobre las superiores, las más elevadas pueden ser concomitantes.

No todos los individuos sienten necesidades de autorrealización, debido a que es una conquista individual. Según Maslow, cuando no se colman las necesidades de autorrealización afloran cierto grado de cinismo, los disgustos, la depresión, la invalidez emocional y la alienación.

Maslow consideró autorrealizados a un grupo de personajes históricos que estimaba cumplían dichos criterios: Abraham Lincoln, Thomas Jefferson, Mahatma Gandhi, Albert Einstein, Eleanor Roosevelt, William James, entre otros. Dedujo de sus biografías, escritos y actividades una serie de cualidades similares.

Estimaba que eran personas:

- Centradas en la realidad, que sabían diferenciar lo falso o ficticio de lo real y genuino.

- Centradas en los problemas, que enfrentan los problemas en virtud de sus soluciones.

- Con una percepción diferente de los significados y los fines.

En sus relaciones con los demás, eran personas:

- Con necesidad de privacidad, sintiéndose cómodos en esta situación.

- Independientes de la cultura y el entorno dominante, basándose más en experiencias y juicios propios.

- Resistentes a la enculturación, pues no eran susceptibles a la presión social; eran inconformistas.

- Con sentido del humor no hostil, prefiriendo bromas de sí mismos o de la condición humana.

- Buena aceptación de sí mismos y de los demás, tal como eran, no pretenciosos ni artificiales.

- Frescura en la apreciación, creativos, inventivos y originales.

- Con tendencia a vivir con más intensidad las experiencias que el resto de la humanidad.

Las críticas que recibe esta teoría de Maslow señalan que la felicidad es subjetiva e independiente de necesidades y estereotipos culturales, así como también la autorrealización es posible ante carencias materiales, pero no espirituales.


domingo, 12 de julio de 2015

La senda estrecha de la verdad

Este cuento está incluido en el libro “El canto del pájaro” de Anthony de Mello.

En cierta ocasión, Dios advirtió a los hombres que un terremoto se tragaría el agua de toda la Tierra y sería reemplazada por otra que haría enloquecer a todo el mundo. Tan solo el profeta se tomó en serio lo que Dios dijo y transportó hasta su cueva de la montaña enormes recipientes de agua para que no le faltara el resto de su vida.

Efectivamente, se produjo el terremoto, desapareció el agua existente y una nueva llenó los arroyos, los lagos, los ríos y los estanques.

Algunos meses más tarde bajó el profeta de su montaña para ver lo que había ocurrido. Todo el mundo se había vuelto loco. Todos le atacaban y estaban convencidos de que el loco era él.

El profeta regresó a su cueva contento por haber tenido la precaución de guardar agua, pero, a medida que transcurría el tiempo, la soledad se le hacía insoportable. Anhelaba tener compañía humana y descendió de nuevo a la llanura, pero, nuevamente, fue rechazado por la gente, tan diferente de él.

Entonces, el profeta tomó su decisión: tiró el agua que había guardado, bebió del agua nueva y se unió a sus semejantes en su locura.

Cuando buscas la Verdad, vas solo. La senda es demasiado estrecha para llevar compañía. Pero ¿quién puede soportar semejante soledad?


martes, 7 de julio de 2015

Cambia, mejora el mundo

Fuente: “Los 88 peldaños del éxito” de Anxo Pérez.


  “Tomorrow” (“Mañana”). Musical “Annie”. Piano.

Hoy hace cinco años que publiqué la primera entrada del blog: “El señor de la tinieblas”, un bonito cuento que nos habla de cómo el miedo es el único capaz de vencer al amor, la fuerza que mueve el Universo… Hoy, casi con la misma ilusión, publico su entrada número quinientos sesenta.

En repetidas ocasiones he manifestado que “Si yo cambio, todo cambia” es un filtro para mi experiencia emocional porque, al describirla por medio del lenguaje escrito, hace que elimine la negatividad que pudiera contener; que al blog le he dedicado y dedico gran parte de mi tiempo libre; que en él doy lo mejor de mí; que mientras selecciono las fuentes, elaboro y reelaboro las entradas, tengo la certeza de que soy yo la que más aprende; que este blog forma parte de mi Compromiso… Pero a veces dudo, creo que no vale la pena y pienso que, tal vez, debería ponerle el cartel de “The End”. Cuando esto ocurre, hago mías las palabras de Scarlett O´Hara: “Ahora no puedo pensar en ello, me volvería loca si lo hiciera... ¡Ya lo pensaré mañana!... y, de momento, aquí sigo, celebrando su quinto aniversario.

Después de cinco años, si algo he querido transmitir es que, si quieres cambiar tus circunstancias, tienes que cambiar tú. Si tu entorno no te da lo que buscas, debes cambiar tú para provocarlo. Si quieres cambiar el mundo, tienes que cambiar tú.

No pienses que para mejorar el mundo es necesario resolver ni todos sus problemas ni todo de un problema. Piensa que, para mejorarlo, solo tienes que mejorar tu parcela. Sacar de la pobreza a un pobre resuelve el cero por ciento de la pobreza mundial, pero el cien por ciento de la suya.

El mundo es un puzle y tú el dueño de una pieza. No puedes cambiar el mundo, pero puedes mejorar la parcela que tú controlas y al hacerlo, contagias a los que están cerca de ti y el mundo mejora...

GRACIAS...

A todos los que visitáis y seguís el blog.

A los que me habéis acompañado desde el principio… GRACIAS.

Seguiré estando aquí mismo.



ALGUNAS ENTRADAS RELACIONADAS EN ESTE BLOG:

- Hoy cumplimos un añito (2011)
- Dos años despertando (2012)
- Después de tres años sigue valiendo la pena... (2013)
- Mi compromiso (2014)
- El mejor regalo (2016)

jueves, 2 de julio de 2015

Lleva tiempo llegar a ser joven

“Lleva tiempo llegar a ser joven”.
Pablo Picasso



Fuente: “Los 88 peldaños del éxito” de Anxo Pérez.

En el mundo en que vivimos la sociedad es víctima de una glorificación de la juventud que es falsa. Por cada ventaja de tener veinte años que la gente ve, existe una desventaja que la gente no ve. No se tiene una vida más fácil por el mero hecho de ser más joven. Dependiendo de en qué nos centremos, los veinte años tienen el mismo número de ventajas y desventajas que los sesenta.

De la juventud solo vemos y solo recordamos lo positivo y minimizamos lo negativo.

La juventud depende poco de la edad y mucho de la mentalidad. Existen muchísimas personas viejas con veinte años y jóvenes con ochenta. Cuando un chico de veinte años quema un verano tirado en el sofá o en la playa incapaz de vencer la desidia en lugar de hacer voluntariado, buscar algún tipo de trabajo, realizar un cursillo, leer un libro, o generar y poner en práctica una idea que produzca valor, está siendo un veinteañero viejo. Cuando una señora de ochenta años se pone a aprender un nuevo idioma o a abrir un blog, está siendo una octogenaria joven.

Tienes los años que has vivido. Si no lamentas los años vividos, ¿por qué lamentar tu edad?

Nunca pidas disculpas por tu edad. Tanto si te consideras viejo como si te consideras joven, tendrás razón.