Cuando era niña, y no tan niña, me pasaba los días “esperando a que”: esperando a que llegasen las Navidades, esperando a que llegasen las vacaciones de Semana Santa, esperando a que llegasen las vacaciones de verano, esperando a que acabara la escuela primaria, para luego esperar a que terminara la secundaria y luego la universidad...
Maduré el día en que me di cuenta del error tan grave que estaba cometiendo. Vivir así era quedarme sin vida.
He aprendido a no esperar a lo que sea que venga después. He aprendido a disfrutar de lo que es en lugar de anhelar lo que podría ser. Sigo teniendo deseos que hacen que me supere, pero no vivo de ellos.
Vivir en el futuro es vivir en una hipótesis y vivir en el pasado, por mucho que el recordar endulce mi mente, es vivir en la nostalgia.
Ahora vivo disfrutando del presente, no esperando a que trascurra. Intento hacer aquello que para mí tiene significado y encontrar significado en aquello que hago.
Aprecio la vida y agradezco haber nacido. Doy gracias a la vida.
Quiero “ilustrar” esta entrada con el cortometraje “Las esperas” dirigido por Ismael Curbelo Betancort, que obtuvo, en el año 2003, una mención especial en el I Concurso de Creación Audiovisual “Canarias Rueda”. Grabado en Lanzarote, este sencillo vídeo está protagonizado por una abuela y su nieta, interpretadas por las actrices, no profesionales, Nieves Betancort y Marga Torres.
“La vida pasa ante tus ojos esperando el tren de la felicidad que nunca llega...”.
“La felicidad no llega cuando conseguimos lo que deseamos, sino cuando sabemos disfrutar de lo que tenemos”.
- Morir lentamente en vida
- Para vivir
- Solo tienes que vivir
- Vivir es un milagro
- Vivir por segunda vez