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sábado, 31 de diciembre de 2022

Puestos a escoger

Felicitación del Año Nuevo 2023


 “A Million Dreams”. (B.S. “The Greatest Showman”). Alexandra Porat.

Fuente: “Saca partido a tu vida” de Mª Jesús Álava.

No podemos decidir dónde nacemos ni las circunstancias que nos rodean, pero sí podemos elegir nuestra actitud ante la vida y, puestos a escoger…

❊ Elige quererte bien y ser una persona libre de pensamiento.

❊ Vive con dignidad y alegría.

❊ Levántate tras cada caída. Que tu ilusión prevalezca sobre tu desánimo.

❊ Decide vivir facilitando y alegrando la vida de los demás. Hay personas que van por la vida poniendo zancadillas y amargando a los demás.

❊ Elige lealtad, coherencia y compromiso. A veces hay que decir a otras personas verdades que no quieren escuchar. No elijas el camino cómodo.

❊ Valora lo que tienes y da gracias a la vida por todo lo que te ha dado. No vivas en continua insatisfacción.

❊ Hay personas que solo hablan y, al final, sus actos no tienen nada que ver con sus palabras. Prefiere hablar menos y hacer más. No te dejes llevar por el envoltorio y rodéate de personas auténticas.

❊ Ten cerca a personas sensibles, generosas y respetuosas. Serán siempre un lujo. Las personas egoístas, carentes de empatía y sobradas de soberbia serán una mala compañía.

❊ Decide si te dejas arrastrar por el pesimismo o te llenas de positividad. El mal humor puede ser contagioso, pero la alegría, el buen ánimo, la simpatía, la cercanía y la afectividad pueden generar un ambiente de concordia y bienestar.

❊ Decide si quieres pasar la vida quejándote y no moviendo un dedo para mejorar o no quejarte y aprender, ayudar y valorar lo que tienes.

❊ Aunque habrá personas que te traicionen y desagradecidas, selecciona, siempre las habrá, a personas en las que poder confiar.

❊ Puedes vivir cada día con intensidad o con apatía. Escoge entre vivir o sobrevivir. Aunque las circunstancias te impidan ser libre, siempre te quedará la libertad de pensamiento.

❊ Nuestra mente tiene un gran poder, tanto para lo bueno como para lo malo. Puedes utilizarla para dañar o para ayudar a los demás. Tú decides.

❊ Podemos aprender en las dificultades o amargarnos en las contrariedades. Aprende y crece. No optes por hundirte y resignarte.

❊ Hay personas que siempre están dispuestas a ayudar y otras que solo quieren aprovecharse de los demás. Mira bien a quiénes das tu afecto.

Podemos decidir la forma en la que enfocar nuestra vida y, puestos a escoger, hazlo bien. Elige vivir de verdad.

¡FELIZ AÑO NUEVO!


ALGUNAS ENTRADAS RELACIONADAS EN ESTE BLOG:

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- El poder de cambiar (2020)
- Fluye con la vida (2019)
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- Te desafío (2017)

sábado, 24 de diciembre de 2022

Tu mejor versión

Felicitación de Navidad del año 2022


 “The first Noel” (“La primera Navidad”). Susan Boyle.

Fuente: “Somos fuerza” de Patricia Ramírez y “El cambio” Walter Dyer.

Los valores nos definen. Son la imagen de lo que deseamos ser y de cómo queremos vivir. Son nuestra guía, nuestra filosofía y nuestros principios.

Hay valores que nos ayudan a vivir a nivel individual, pero hay otros valores como la bondad, la solidaridad, la paciencia, la gratitud…, que ayudan a mejorar la vida de los demás. Son valores que nos hacen crecer y sentirnos mejores personas.

En esta sociedad, consumista e individualista, está tan de moda afirmar que tenemos que querernos más a nosotros mismos, cuidarnos y mimarnos, que empezamos a creer que ser bueno es ser tonto.

Estos valores no llegan a nuestra vida y ya se quedan en ella, así como así, porque son bonitos… Se quedan cuando elaboramos un plan para que formen parte de nuestra forma de ser, sentir y actuar. Tal vez, podría servirte de ayuda la siguiente propuesta:

❄ Cada mañana, al levantarte, pregúntate: ¿Cómo puedo mejorar la vida de las personas que me rodean?

❄ Piensa en un cumplido o en un favor, aunque sea pequeño, que puedas hacer a alguien.

❄ Cuando te encuentres con otras personas (en la escalera, en el quiosco, en el supermercado, en la cafetería…), saluda y sonríe. Es gratis y nunca sabemos cuánto puede necesitar la otra persona esa palabra o gesto amable. El mundo está lleno de amargados. Encontrarte con alguien que sonríe es un regalo. Sé amable y, si puedes, simpático.

❄ Trata a la gente con respeto y educación. No hagas juicios de valor. No seas clasista. Todas las personas merecen la mejor versión de ti mismo.

❄ Sé generoso. A la gente le cuesta mucho compartir, sobre todo sus ideas. Tienen miedo de que se las copien y le roben las medallas. Es cierto que te encontrarás con “trepas”, pero vale la pena correr el riesgo porque conocerás también a gente generosa como tú.

❄ Ve en son de paz. No anticipes que te van a tratar mal ni las perversas intenciones de los demás ni tu fracaso... Piensa que la gente “te responderá” y ayudará. En caso contrario, siempre tienes tiempo de enfadarte.

❄ Sé honesto y justo.

❄ Ten la valentía de ir de frente y de dar la cara.

❄ Actúa en función de tu escala de valores. Para dormir bien, no hay nada mejor que una conciencia tranquila.

❄ Siembra, pero no esperes a la cosecha. Trata de que todo fluya sin esperar el retorno. Así serás más libre.

❄ Acepta con paciencia los defectos de los demás. No saltes a la primera; calla, deja pasar y, pasado el enfado, corrige, si fuera necesario, con delicadeza.

Los valores están al alcance de cualquier persona. No dependen del poder, de la fama, del dinero, de la cultura… Dependen del corazón.

Cuando dejemos este mundo los demás conservarán en su memoria la bondad y los valores que fuimos capaces de generar.

Nadie necesita preguntarse cuál es su objetivo en esta vida. Lo encontraremos ayudando. Pensemos en la gente que nos acompaña en el camino. Siempre.

Feliz Navidad y paz en la Tierra a las personas de bien.


miércoles, 21 de diciembre de 2022

El misterio de la vida

Felicitación de Navidad del año 2022 para los seguidores del blog


 “When You Believe” (“Cuando tienes fe”). (“El Príncipe de Egipto”). Lucy y Martha Thomas.

Después de un año, he retomado mi actividad en el blog y no quiero perder la costumbre de seguir felicitando a sus seguidores, a través de Blogger, Facebook, Twitter o Pinterest, con un pequeño “gran mensaje”.

Fuente: Monólogo de Cristina López Schlichting en su programa “Fin de semana” de la cadena de radio Cope del 17-11-2022.

Hay muchas cosas que, tal vez, consideras que son el centro de tu vida, pero, aunque no lo creas, sin ellas podrás seguir viviendo.

Sin embargo, no puedes añadir ni un segundo a tus días. La razón por la que seguimos viviendo, el motor de los rítmicos latidos del corazón, es un inmenso misterio del que sólo sabemos una cosa: no depende de nosotros.

Los seres humanos deseamos ser felices, el bien, la verdad y la belleza. Lo llevamos marcado a fuego en el corazón.

Yo te invito a que pienses sobre el significado de tu vida: quién eres, por qué vives, qué llevas marcado en el corazón.

Cuando te planteas estas preguntas, el anhelo instintivo se convierte en gesto y en acción. Puede ser algo tan sencillo como encender una vela, susurrar una plegaria o dar una ayuda al que lo necesita.

¡Feliz Navidad!


jueves, 15 de diciembre de 2022

Nada más que la verdad


Este cuento de Dallas Morning News está incluido en el libro “Sopa de pollo para el alma” de Jack Canfield y Mark Victor Hansen.

David Casstevens, del periódico Dallas Morning News, cuenta un episodio referente a Frank Szymanski, estudiante de la Universidad de Notre Dame allá por los años cuarenta, a quien habían llamado como testigo en un proceso civil en el South Bend.

—Este año, ¿está usted en el equipo de fútbol del Notre Dame?

—Sí, señoría.

—¿En qué posición?

—Centro, señoría.

—Y ¿qué tal centro es?

Szymanski se removió en su asiento, pero respondió con voz firme:

—Señor, soy el mejor centro que jamás haya tenido el equipo de Notre Dame.

El entrenador Frank Leahy, que se encontraba en la sala del tribunal, se quedó sorprendido: Szymanski había sido siempre modesto y nada fanfarrón, de manera que, terminada la sesión del tribunal, Leahy hizo un aparte con él para preguntarle por qué se había expresado de esa manera. Szymanski se ruborizó.

—Me supo muy mal hacerlo, entrenador —fue su respuesta—, pero es que, después de todo, estaba bajo juramento.


jueves, 8 de diciembre de 2022

Emmanuel

Entre los recuerdos más emotivos de mi infancia está el de montar el “belén” cada año, el día 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada Concepción de María, en el taquillón de la entrada de mi casa.

Esta bella tradición forma parte de “mi patrimonio” cultural y es grande mi alegría cuando compruebo que el belén, aunque compartiendo espacio con otras costumbres anglosajonas, sigue poniéndose en muchos hogares españoles.

Hoy, puntual a la cita, deseo enseñaros, un año más, el belén de mi casa a través de un vídeo cuyo título no requiere mucha aclaración: “Emmanuel” (Dios con nosotros). La música de fondo es la obra “Follow the dream” de Richard Harvey.

Es un belén de misterios que recoge escenas evangélicas que narran los acontecimientos acaecidos en torno al nacimiento y la infancia de Jesús. Este tipo de belén, como ocurriera en la Edad Media, recoge una de las tradiciones más antiguas del catolicismo: la de enseñar por medio de la imagen. En él se sacrifica la unidad espacio-temporal y así, por ejemplo, no existe ningún inconveniente para situar en un mismo escenario Belén y Nazaret o para que hechos alejados en el tiempo, como la Anunciación a la Virgen o la Presentación en el templo, parezca que suceden en un mismo momento y a muy pocos metros de distancia.

Este año hemos recogido la Anunciación del Ángel a María, los Desposorios de María y José, la Visita de María a su prima Isabel, el Empadronamiento en Belén, José y María buscando posada, el Nacimiento de Jesús, la Anunciación a los pastores, la Visita de los Reyes Magos, la Presentación de Jesús en el templo, la Huida a Egipto, la Matanza de los Inocentes y, por último, cerrando el ciclo, el Niño Jesús perdido y hallado en el templo. En esta ocasión no ha sido posible incluir, por razones de espacio, El sueño de José y el regreso de la Sagrada Familia a Nazaret.

Aunque es un belén bíblico, también llamado “hebreo” o “palestino”, tiene importantes detalles locales incluyendo monumentos de Jaén, mi ciudad: el castillo de Santa Catalina, el pilar del Arrabalejo, el arco de San Lorenzo, los arcos del Torreón del Conde de Torralba y la basílica de San Ildefonso.

Puede calificarse de popular porque se han utilizado técnicas sencillas de montaje con materiales tradicionales (corcho, musgo, serrín, etc.), pero, a su vez, es un belén artístico porque su artífice es quien construye los edificios y pone la iluminación adecuada.

Costumbre, tradición, religiosidad, arte e ingenio son factores que incurren en un belenista para hacer de un belén una obra de admiración para aquel que la contempla.

Música del vídeo: “Follow the dream” de Richard Harvey.


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- Magníficat (2019)
- Un soplo de aire fresco (2018)
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jueves, 1 de diciembre de 2022

Niveles de consciencia (II)


Fuente: “El amor de tu vida” de Rut Nieves

Para que una relación fluya es necesario que las dos personas hablen el mismo idioma, es decir, que se encuentren en niveles de consciencia similares o, dicho de otra forma, que vibren en la misma frecuencia.

Si se encuentran en niveles de consciencia muy diferentes, verán la vida de forma muy distinta y, probablemente, no sean capaces de comprenderse. En el mejor de los casos, la persona que tiene un nivel de consciencia más elevado podrá comprender a la otra, pero la que está en un nivel de consciencia más bajo no entenderá nada de lo que dice la otra. Esto no significa que no pueda sostenerse una relación entre dos personas con niveles de consciencia muy diferentes, pero la comunicación entre ambas será más complicada que si estuvieran en niveles parecidos.

Desde el victimismo hasta la iluminación, hay una gama muy amplia de niveles de consciencia. Como la iluminación es algo, probablemente, muy lejano, hablaremos, mejor, de estado de gratitud.

La mayor diferencia entre dos personas con distintos niveles de consciencia está en cómo gestionan el sufrimiento. Cuando estamos de buen humor, todo fluye a las mil maravillas con todo el mundo, independientemente del nivel de consciencia de cada persona, pero en las horas bajas, es determinante el nivel de consciencia desde el que se vive.

Las personas que viven en un nivel de consciencia muy bajo se ven a sí mismas como víctimas de las circunstancias, opinan que la vida es injusta, viven desde la desconfianza y el miedo. Creen en la maldad de las personas, las juzgan, las critican y, por esta razón, piensan que tienen que defenderse de las personas que les quieren hacer daño.

Son personas que están dominadas por el ego o, lo que es lo mismo, por su mente y sufren mucho porque no son conscientes del daño que se hacen a sí mismas al ser esclavas de los programas y juicios de su mente.

Cuando atraviesan una experiencia dolorosa, culpan al otro, lo hacen responsable de su sufrimiento e interpretan la actitud del otro como un ataque.

Las personas que viven en un nivel de consciencia elevado contemplan la vida con confianza desde un estado de gratitud, están abiertas al aprendizaje, se reconocen responsables de su vida, son capaces de ver la bondad y la inocencia de cada persona, son empáticas, comprensivas, respetuosas, se siente bendecidas, agradecidas y la vida les parece un milagro. Son capaces de sorprenderse como un niño y de ver la belleza incluso en las pequeñas cosas de la vida. Son fuente de alegría y bienestar, llevan la paz con su presencia donde quiera que vayan.

Su ego existe, pero muy debilitado porque lo integrado y fundido con su amor. Se han librado del control de su mente y saben que es una herramienta maravillosa, cuando se usa correctamente.

Cuando viven una experiencia dolorosa, la aceptan con un profundo respeto y se abren al aprendizaje, asumiendo su completa responsabilidad. No tratan de librarse del dolor culpando al otro. No ven maldad en el otro, no le juzgan como a un enemigo y no compiten con él. Todo lo contrario: le miran con cariño y compasión, porque saben que la única razón por la que el otro se comporta así es porque está sufriendo y no sabe hacer las cosas de otra manera.